martes, 5 de junio de 2012

Wislawa Szymborska



Wislawa Szymborska

 ALGUNA GENTE

Alguna gente que huye de otra gente.
En algún país bajo el sol
y unas pocas nubes.
Dejan tras de sí algún todo propio,
sembrados, algunas gallinas, perros,
espejitos, en los que ahora se contempla el fuego.
Llevan sobre las espaldas jarras y bultos,
que cuanto más vacíos, más pesan con el paso de los días.
Sucede a las calladas que alguien se detenga,
y en bullicio que alguien arrebate el pan de otro
y que alguien sacuda a un niño muerto.
Delante de ellos siempre el camino que no es,
ni el puente que debería estar
sobre el río extrañamente rosado.
Alrededor de ellos, algunos disparos,
a veces más cercanos, a veces más lejanos.
En lo alto un avión vuela en círculos.
Sería útil alguna invisibilidad,
alguna petrificación parda,
o mejor todavía, un no ser
por un tiempo breve, o quizá más largo.
Todavía sucederá algo, pero dónde y qué.
Alguien les saldrá al encuentro, pero cuándo, quién,
bajo qué apariencias y con qué intenciones.
Si pudiere elegir,
quizá no quiera ser enemigo
y los deje con alguna vida.

 “Chwila” (“Momento”), 2002
Trad. Bárbara Gill

MOMENTO

Camino por la cuesta de una loma verdecida.
Hierba, florcitas en la hierba
como en una lámina para niños.
El cielo brumoso, acelestándose.
En silencio el paisaje se despliega sobre otras colinas.
Como si acá no hubiera zarza, ni siluro,
ni rocas que mutuamente se gruñeran,
Ninguna encumbrada altura,
ninguna noche en llamas,
ni días en turbiones de oscuridad.
Como si por aquí no se deslizaran pantanos
entre afiebrados delirios,
helados escalofríos.
Como si sólo en alguna otra parte se encresparan los mares
y desgarraran los bordes de los horizontes.
Son las nueve y treinta, hora local.
Todo en su sitio y en ejemplo de concordia.
En la hondonada, el arroyito como un arroyito.
El senderito con aspecto del senderito de siempre y para siempre.
El bosque con la apariencia de un bosque por los siglos de los siglos y amén,
y en lo alto los pájaros en vuelo en el rol de pájaros en vuelo.
Hasta donde alcance la mirada, reina aquí el momento,
Uno de esos terrenales momentos
que se ruega que perduren.

 “Chwila” (“Momento”), 2002
Trad. Bárbara Gill

3 comentarios:

  1. Un poema doloroso y otro luminoso , quisiera que la imagen del segundo se congelara y me acompañe , siempre. Gracias!
    amelia

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  2. La poeta mayúscula, la Szymborska. La premio Nóbel. Nunca olvidaré su poema "La Muerte sin Exageración". Enorme pena que la muerte la haya encontrado. Que no pudier zafar.(Para quien no lo haya hecho es de lectura indispensable).
    Gra. Ur.

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  3. Un lenguaje soberano, vivo, algunas veces como hablándose a sí misma. Denuncia males y dolores, pero se percibe su amor por el mundo.
    Excelente publicación. Voy a seguir el consejo de Gra.Ur.
    MARITA RAGOZZA

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